¿Qué es el hidrógeno verde?
El hidrógeno verde está subiendo posiciones en el ranking de popularidad de las energías sostenibles. Y es que cuenta con propiedades que le valen todo un sobresaliente. Produce energía 100% limpia y no emite CO2. Sin lugar a duda, dos aspectos indispensables en el mix energético del mañana.
El hidrógeno es muy abundante en nuestro planeta. Constituye el 75 % de la materia del Universo. El problema es que es muy complicado encontrarlo en estado libre y de forma aislada, sino que convive con otros elementos como:
- El oxígeno, formando moléculas de agua
- El carbono, formando compuestos orgánicos
- El gas natural
Por tanto, no se puede extraer directamente de la naturaleza, sino que hay que “producirlo”. Y es aquí donde el hidrógeno se vuelve de diferentes colores:
- El hidrógeno gris. Se genera a través de reformado de vapor de gas natural. Por el momento, es el que más se utiliza y es el menos respetuoso con el medio ambiente. Para su generación, se siguen necesitando combustibles fósiles.
- El hidrógeno azul. Es muy similar al gris; aunque es menos contaminante ya que el CO2 se retira con un método llamado captura y almacenamiento.
- El hidrógeno verde, protagonista de nuestro post de hoy. Este tipo de hidrógeno es el más sostenible, aunque lamentablemente es el menos utilizado a día de hoy. Su fabricación no emite CO2 y transforma el agua en moléculas de hidrógeno y oxígeno, a través de un proceso conocido como electrolisis.
¿Cómo se produce el hidrógeno verde?
Un estudio de BloombergNEF (BNEF) estima que el hidrógeno verde puede reducir en las próximas décadas hasta el 34% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial. No obstante, solo será posible si se invierten en tecnologías de producción y en sistemas de almacenamiento.
Una de estas tecnologías son las infraestructuras Power-to-X. Gracias a esta metodología, se puede convertir la energía eléctrica en fuentes de energía química líquidas o gaseosas a través del proceso de electrólisis y otros procesos similares. De esta manera, al utilizar la corriente eléctrica, el agua se divide en oxígeno e hidrógeno.
Las tecnologías Power-to-X favorecen la producción de hidrógeno y permiten avanzar hacia la descarbonización de una manera eficaz. Además, hacen posible una transición fluida del mundo fósil a un mundo totalmente sostenible. Esta tecnología proporciona:
- Una incorporación de combustibles limpios en el mix energético de manera eficaz.
- No se requieren cambios inmediatos en la infraestructura de combustible
- Tampoco es necesario transformar las aplicaciones del usuario final.
Siemens cuenta con este tipo de equipos power-to-x. Entre ellos, soluciones de electrólisis para la producción y almacenamiento de hidrógeno. El hidrógeno generado se puede almacenar en contenedores especiales durante largos periodos de tiempo.
Siemens ayuda a la fabricación del hidrógeno verde
Hace unos días, Siemens firmó un acuerdo de colaboración con la empresa energética Uniper. El objetivo de esta alianza es la producción y el uso de hidrógeno verde.
Uniper persigue examinar el uso de hidrógeno limpio en sus centrales eléctricas de gas. Para lograr esta ardua tarea, ha confiado en la longeva experiencia energética de Siemens que permitirá:
- Descarbonizar sectores de la generación de energía
- Analizar y determinar el potencial de las turbinas de gas y las instalaciones de almacenamiento de gas para el uso de hidrógeno
- Investigar el rol del hidrógeno verde en las centrales eléctricas de carbón de Uniper.
La compañía tiene previsto cerrar o reconvertir las centrales eléctricas de carbón europeas antes del 2025. Este proyecto persigue dar una segunda vida a estas plantas a través del hidrógeno verde.
Asimismo, gracias a este plan, Siemens ayudará a Uniper a alcanzar sus objetivos de sostenibilidad y de descarbonización:
- Reducir las emisiones de CO2 en la generación de energía en Europa de 22 millones de toneladas hoy, a cero emisiones para 2035.
- La compañía ya produce 24 teravatios hora de electricidad libre de carbono.
- Uniper invertirá en los próximos tres años más de 1.200 millones de euros en proyectos como este para reducir sus emisiones de carbono.
Estamos seguros de que, en los próximos meses, veremos más iniciativas de este tipo en las que el hidrógeno sea el protagonista frente a clásicos, hoy ya del pasado, como el carbono.