La atención sanitaria también tiene que ser sostenible
La industria sanitaria es un pilar fundamental del funcionamiento de nuestra sociedad pero, a la vez, puede consumir muchos recursos y producir una gran cantidad de desechos, algunos de ellos peligrosos. Para ayudar a los hospitales a realizar la transición hacia la sostenibilidad, Siemens ha creado Green+ Hospitals, una gama de soluciones dirigidas a la creación de infraestructuras sostenibles para la atención sanitaria.
Esta línea se asienta en tres pilares fundamentales: sostenibilidad, eficiencia y calidad. Su objetivo es cambiar la política ambiental de los hospitales, que en ocasiones sólo se centra en la separación de residuos, introduciendo medidas pioneras para reducir el consumo de recursos y producir menos desechos contaminantes. Entre las medidas ambientales que introduce Green+ Hospitals figuran:
- Programas de eficiencia energética para adecuar la intensidad de la iluminación al espacio, limpiar regularmente las luminarias y sustituir los tubos fluorescentes por otros más eficaces y menos tóxicos.
- Optimizar y modernizar los sistemas de calefacción y aire acondicionado, lo que permite ahorrar costes en un 40%.
- Reducir el consumo de agua con lavadoras que consuman menos agua o instalando filtros en los grifos para reducir el caudal en un 50%.
- Instalar aparatos médicos más eficientes y con menor consumo energético.
- Mejorar los sistemas de seguridad y vigilancia de los centros instalando detectores antiincendios o circuitos de video vigilancia.
- Eliminar el mercurio de los centros, sustituyendo los termómetros tradicionales por los eléctricos y separando el mercurio de los aparatos que lo contienen, como tubos fluorescentes, mantas eléctricas y equipos de electro medicina.
- Reducir el consumo del policloruro de vinilo (PVC), un plástico muy contaminante con el que se fabrican las bolsas de suero y las sondas y sustituirlo por materiales hechos de silicona.
Algunas de estas medidas han sido aplicadas, por ejemplo, en el Centro Clínico Bremerhaven/Reinkenheide consiguiendo reducir el consumo energético en más de un 25%, lo que supone un ahorro de más 520.000 euros al año y ha reducido las emisiones de CO2 en más de 4.100 toneladas anuales.
En Holanda también se están aplicando medidas sostenibles similares, como en El Centro Médico de Ámsterdam, donde se han colocado sensores de luz, baños que ahorran agua, vidrios aislantes y hasta un techo verde para ganar en eficiencia energética.